La Batalla que todos vamos a perder.
Hay una batalla que ninguno de nosotros puede ganar. La batalla que nunca se detiene. Todos la libramos y la perdemos mientras ocurre, una y otra vez. La batalla contra el tiempo. El tiempo es maestro y verdugo. Hay personas a quienes les pasa el tiempo, pero ellos no pasan por él. Viven sus vidas por accidente, sin aprender, sin intentar, ganando en lo superfluo y perdiendo en lo importante. Aprovecha tu tiempo. Vive a propósito. Salí a aprender, a observar, a escuchar. Arma y desarma el mundo para entender sus piezas. No condenes tu vida a una carrera de la rata en la que correrás y correrás en una rueda que no te llevará a ningún lado. Un trabajo miserable, una relación mediocre, una carrera que odias, solo por tener el título que complazca a otros. Si no sabés por dónde empezar, reflexioná sobre qué es eso que te gusta tanto, que podrías hablar de ello todo el día e intenta convertirlo tu oficio. Te ganarás la vida siendo feliz. No conviertas una meta no cumplida en un castigo, en una prisión ni en una vergüenza. No falta el que pregunte, a veces burlándose: ¿Y vos no eras cantante? ¿Pintor, escritor, actor, qué hacías, taekwondo, karate? No sos un oficio o lo que intentas. Sos un aprendiz unos días y maestro otros. Algunos días comerás miel y otros, sal. Hoy podes ser doctor por obligación y mañana Sensei por vocación o tal vez Sempai. Lo importante es llegar al final de la vida y decir: terminó mi viaje y me voy con gusto porque viví bien.
Gracias Club de Caballeros